VERDADERO: La menopausia significa que los ovarios de una mujer dejan de producir óvulos de forma regular. Aún así, la menopausia lleva consigo un período de tiempo desde que se dejan de tener ciclos menstruales regulares hasta que definitivamente la mujer deja de ovular. Durante este proceso, una mujer aún tiene posibilidades de quedar embarazada incluso de forma natural sin necesitar ningún tratamiento de fertilidad, aunque la posibilidad es muy pequeña y depende sobretodo de la salud de la mujer.
FALSO: Los días más fértiles se producen a mitad del ciclo menstrual (durante la ovulación), pero éste proceso puede variar en cada mujer y en cada ciclo menstrual. Por tanto, no es imposible que la ovulación se adelante o retrase y en consecuencia, existan óvulos maduros durante tu menstruación que puedan ser fecundados y den lugar a un embarazo.
VERDADERO: Cada vez son más las mujeres que deciden ser madres solteras por elección propia. Gracias a la reproducción asistida y a tratamientos de fertilidad como la Inseminación Artificial o la Fecundación in Vitro, una mujer puede quedar embarazada sin la necesidad de tener pareja, con el semen de un donante anónimo. Por el momento, una mujer puede acudir a cualquier clínica de reproducción asistida para ser madre soltera, o incluso recurrir a la Seguridad Social de algunas Comunidades Autónomas de España.
FALSO: Con los tratamientos de fertilidad (especialmente en la Fecundación in Vitro) se implanta más de un embrión y las posibilidades de embarazo se multiplican, así como también las posibilidades de embarazo múltiple. Aún así, realizarse un tratamiento de fertilidad no significa tener un embarazo múltiple: las posibilidades de tener mellizos oscilan en un 20% a través de los tratamientos de fertilidad y un 2% a través de una reproducción natural. Además, el porcentaje de embarazo múltiple con tratamientos de fertilidad se ha reducido considerablemente con los años.
VERDADERO: Gracias a nuevas técnicas de reproducción asistida, como en el caso del DGP (Diagnóstico Genético Preimplantacional), se puede conocer el sexo de un embrión antes de ser implantado en el útero de la mujer. Aún así, es muy importante diferenciar que no se puede elegir el sexo del bebé por voluntad, sólo se puede seleccionar en aquellos casos en que los embriones padezcan problemas genéticos ligados al sexo: sólo es posible la selección de género con fines médicos.
FALSO: Las pastillas anticonceptivas son un buen método para prevenir un embarazo no deseado. Aún así, por muchos años que las hayas tomado, tu fertilidad no se verá reducida cuando quieras ir en busca de tu bebé. Lo ideal es seguir las indicaciones de tu médico o ginecólogo y dejar de tomarlas con la suficiente antelación para que tu cuerpo vuelva a adaptarse al ciclo menstrual fértil con normalidad.
VERDADERO: Aunque no se sabe con exactitud la influencia de los trastornos emocionales en la fertilidad de una persona, sí existen estudios que relacionan el estado de ánimo con las posibilidades de quedar embarazada. De esta forma, síntomas como el estrés o la depresión pueden influir de forma temporal en la fertilidad, reduciendo las posibilidades de quedar embarazada. Por el contrario, una mente positiva y estar relajada puede ayudarte a llevar mejor la búsqueda de embarazo, siendo el proceso mucho más fácil y efectivo.
FALSO: Los problemas de fertilidad pueden aparecer en cualquier momento de la edad de un hombre o una mujer. Además, cuantos más años tenga una mujer o pareja, más dificultades va a tener para conseguir el embarazo. Es por eso que, aunque se haya tenido un hijo anteriormente, puede aparecer algún problema de fertilidad posterior que dificulte la búsqueda de otro hijo. Es muy importante acudir a tu ginecólogo si no has quedado embarazada después de un año de relaciones sexuales regulares sin protección (o después de 6 meses en caso de mujeres mayores de 35 años).
FALSO: Actualmente, un 40% de los casos de infertilidad de una pareja son por factor masculino, así como también otro 40% de los problemas de fertilidad son por factor femenino. El 20% restante de los problemas de fertilidad son una combinación de ambos miembros de la pareja o factores de origen aún desconocido. Así, podemos deducir que los problemas de fertilidad pueden afectar a cualquier persona sin importar cuál sea su sexo.
VERDADERO: Aunque no existe una forma exacta de asegurar tu fertilidad, sí existen algunos hábitos saludables que pueden prevenir la reducción de tu fertilidad. Entre ellos, llevar una dieta sana y equilibrada, evitar la obesidad o la delgadez extrema, realizar ejercicio moderado, evitar todo tipo de drogas (tabaco, alcohol, incluso café), y en definitiva, llevar unos buenos hábitos de vida, te ayudará a mantener tu fertilidad en buen estado y mejorar las posibilidades de quedar embarazada.